Sé que no es necesario el típico resumen del año, pero yo siempre lo hago.
Primero mentalmente, luego termino escupiéndolo.
Sin duda este 2oII se ha caracterizado por haber conocido a una inmensidad de personas, unas maravillosas, otras no tanto, y por haber redescubierto a otras tantas.
Lo más importante: me he conocido a mí misma gracias a todXs ellXs. (O eso creo, a veces no lo sé)
Gracias a la gente fiorentina, A TODxS (no os nombro porque me dejaría la vida aquí).
Pero gracias, desde los que pasaban conmigo 24h al día hasta los que sólo aparecieron una noche y se fueron.
No hubiese sido lo mismo.
Gracias a los 4 zombies que compartieron techo conmigo. A mi pelirroja favorita, malditísima donde las haya, demonios. Y a Siset cap l'estret, por ser el amigo más maravilloso del mundo, creador de las mejores declaraciones de amor del mundo mundial (y gracias por regalármelas en la última de nuestras noches)
Gracias a los el Naima por dejar colonizar sus Happy hours y pinchar a Raffaela, a las calles laberínticas donde encontrar rincones en los que perderse, al señor Moretti , al color de los atardeceres
y al cabruno que me robó mi bici robada.
Gracias a mi primísima, insaciable y perfecta. Gracias por crear momentos preciosos e infinitos. Por esa sonrisa que hace desear la inmortalidad.
Gracias a Carla y a Nury, por hacer la mejor visita de la historia de las visitas fiorentinas y regalar fines de semana dignos de enmarcar y colgar encima de la chimenea.
Gracias al que dejó aquella bolsa de plástico en el suelo de Sta.Croce, porque sin ella no podría haberme pegado la hostia más grande de mi vida.
Gracias a las POPUS, porque cualquier lugar es genial, porque seguís ahí y porque en mi vida se generan incendios de nieve desde que aparecisteis.
Gracias a 1999, porque seguimos rompiendo las ventanas (13 años después)
Gracias a Patricio, por ser ella y quererme tanto. Y admirarnos tanto. Por decirme las verdades sin adornos. Siempre nos quedará Copenhague.
Gracias al Sonorama, porque cambia a las almas.
A Carles (TOE), por ser tan bueno conmigo.
A Anita (asidesastre), por ser tan dulce.
A Laura Rebollo, por ser una de las personas más buenas con las que me he cruzado, y tan jodidamente guapa.
A Nue por ser la italiana más salá.
A Ger por dejarnos una empanada llena de gusanos.
A laGafa, porque este sonorama fue tan genial por ella, por su linterna manual, por nuestro amor incondicional por Bob y por crear un hit.
Gracias a todos aquellos que nos veían y cantaban ese hit y nos pedían fotos. Nos sentimos muy cerca de conseguir actuar en el escenario principal.
Y nuestros vecinos, y a los que sufrían conmigo en la ducha.
Y al doble del guitarra de la oreja de van Gogh.
Gracias al señor Sotelo. Por todo. Sigue ahí y no te vayas nunca.
Gracias a mi Sis, que me lo da todo. Gracias porque eres espectáculo y magia y ni siquiera lo llegas a notar.
Gracias a Carmen de Mairena, porque me felicitó unas diez veces el cumpleaños.
Gracias a mis amigas de toda la vida, porque nos hacemos mayores juntas y seguimos bailando en barracas de pueblo hasta que sale el sol.
Gracias a Pablo Poveda por confiar en mis dibujos y darme la oportunidad de dar imagen a su historia. Y por correr en parques desconocidos.
Gracias a Andriu, por ser la carne de mi uña (en mi cabeza sonaba mejor), a mis queridísimos compañeros de Proyectos (Pau y Berny) porque os veo más que a mis padres. Por sufrirme y aguantarme y por hacer que trabajar sea una maravilla.
Y en definitiva, a todos los que llevais cuatro años y medio conmigo dándolo todo en la PIV (Lauras, Javis, Alux, Heri, Raúl, Irene, Silvilight... ++++++)
Gracias a twitter por enseñarme lo que es el puro vicio.
Gracias a Sergio Darling y Luis por ser compañeros fieles de batallas y conciertos, por compartir el regreso más traumático de un festival y por enseñarme la cultura bueni/mali.
Gracias "a todos los que me han besado y herido, porque están dejándome marchar." (Z)
A mis padres, por cambiar por mí. Por el amor más sincero y eterno.
Al perro que nunca he tenido y al canario que me robaron.
A los domingos por darme motivos para la depresión, el odio y las ganas de matar.
Gracias al "gasolinero" porque me alegra las mañanas.
Y gracias a mí, porque yo lo valgo.
